Buscar este blog

miércoles, 20 de julio de 2016

Quiero un amor de verdad, no de cuento

Creo que no pido mucho... Sólo alguien que de verdad sepa tratar a una mujer, incluso a veces, a una niña como yo. Que a pesar de saber que ya me tiene, siga conquistándome cada día. Recordándome lo importante que soy para él. Que me diga lo guapa que soy cuando me arreglo o que me sorprenda con un "estás preciosa recién levantada". Necesito a una persona que ame todos mis defectos, que me haga sentir segura a su lado y olvidarme durante un rato de todos ellos, que son unos cuantos... Esa persona que descubra todos mis lunares, hasta ese que tanto escondo o tanto odio. Alguien que a pesar de mis manías,me quiera y las comprenda. Que no le importe mis cambios de humor, o mis tonterías inoportunas, básicamente alguien que aguante mi locura.
Alguien que el día que me despierte desanimada, y me ponga mi pantalón corto de chándal, mi camiseta básica y mi pelo despeinado, me vea y aún así se le iluminen los ojos.
Alguien que me escuche, que me haga hablar por los codos como tanto me gusta y no pare de hacerme reír durante horas. Que se preocupe por mí, si he dormido bien o mal, que me pregunte cómo me ha ido el día. Que le encante estar conmigo, dormir conmigo y despertar conmigo. Esa persona que a pesar de estar alejados, sienta que no estoy sola.
Alguien que aunque no comparta mis aficiones, me apoye en todo lo que hago. Que vea esa película que tanto odia con tal de verla conmigo, que aguante una obra o un ballet de 2 horas para hacerme feliz, o que escuche mi música favorita a pesar de no escuchar ese género con tal de conocerme un poquito más. Que hasta estar en silencio, sea un sonido bonito. Y a su vez, que me enseñe todo lo que le gusta a él, sus hobbies, su música favorita, sus manías, sus secretos más íntimos. Y que se alegre de verdad cuando le confiese alguno de los míos. Alguien que me enseñe cosas nuevas, que me muestre un mundo que no conocía. Que me ilumine el camino, que me saque una sonrisa, que me brillen los ojos. Y que le pase lo mismo a él cuando le preguntan por mí. Que al oír mi nombre en la boca de alguien, se quede sin palabras para describirme, que demuestre que me quiere, pero sobre todo a mí.
Que valore los pequeños detalles que hago por él. Y que a mí me enamoren los suyos por tontos que sean, que me llame aunque sea sólo para escuchar mi voz 2 minutos y se nos alegre un poquito más el día a los dos. Ese, que todavía se pone nervioso al verme y espera ansioso que llegue ese momento.
Alguien que controle mi estado de nervios cuando me enfado y sepa calmarme, que no me juzgue por mis errores, me haga aprender de ellos y me ayude a entender que no soy tan horrible como pienso, que todo el mundo comete fallos y los míos son muy normales. Que consiga que me disculpe cada vez que hago algo mal y que él lo haga cuando sea necesario. Que sepa cuando algo va mal, y antes de rayarse la cabeza sin motivos, hable conmigo para no llegar a discusiones. Las únicas peleas que me interesan son en la cama. Por eso quiero que esa persona no abandone a la primera de cambio, al primer tropezón, a la primera piedra en el camino, simplemente que esté en las buenas y en las malas. Y que desde el primer instante me bese igual que en el último, para demostrarme la importancia de mis besos. Que nuestros cuerpos se fundan en un abrazo o en un apretón de manos, en esas caricias que dicen más que palabras. Que me ponen el corazón a mil por hora.
Creo que no pido tanto, sólo alguien que no me falle y que antes de prometerme un para siempre, me demuestre un día a día.
Un amor de verdad, de los de antes.