Me he caído y me he levantado tantas veces como ha hecho falta. Me he llegado a tropezar más de una vez en la misma piedra. He dado muchas oportunidades y he perdonado cuando no debería haberlo hecho. He dejado claro muchas cosas para callar a la gente. Y día tras día me he levantado con ganas de comerme el mundo, pero al final ha resultado que el mundo me ha comido a mí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario